I
En el incienso del descenso en el acceso del pensamiento,
He de hallar un receso en este recelo de desconcierto,
No hay concierto ni elemento sin complemento,
Que le de un segmento a este sentimiento,
En el pretexto y detesto del sexto contexto,
Éxtasis del sistema cambiante dilema,
Matemático o dietético…
Corroboro en coro a esa voz que oigo,
En la oración nociva sin dilación y ahogo,
No corro ni compruebo si hay logro,
Giro, grito, toco, coloco, como modelo,
A mi antojo el verso sostenido,
Por la voz del momento y el oído
Inconcluso de un sonido cuyo tono tonifico,
En el aullido dolido de un dominio sin dueño….
Sueño un mañana sin saña,
En la caña de una borrachera que da olvido al suplicio,
De un corazón partido en el infortunio,
De un sin dicho y destino sin atino,
En la desdicha sin la cochina angustia
De la infamia y la mentira,
Acarrea a la carretera la lágrima pérdida,
Pidiendo, suplicando, suspirando, confundiendo,
Al dilema y la duda de la conducta tácita.
Tamaña mentira en la farsa de la vida,
Varía la vía voraz de pericias,
Picardía y diatriba en la dicha,
De la mano amiga sin pasiva avaricia,
Recia resina que a todos nos complica,
La cómplice sonrisa de la fortuna ficticia.
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