domingo, 30 de marzo de 2014

XXIV


En la cima y contra viento,
Por las alturas de tu mano,
Pletórica y libre de pesares,
Así me ensalzas mi arcángel,
Si a tu vera me llamas,
No me lleves a la otra orilla,
Temprano es y a tus pies ya me postraré,
No por devota sumisión,
No busco esclavitud...
Sino, por la devoción del amante
Que ensancha el horizonte,
E ilumina la fe del caminante,
Misionero del sentir y saber que busca a cupido,
Siendo a tu vera feliz como un colibrí,
Que embriaga de calor la voz y el latir,
Parpadeo del vivir,
Influjo del resurgir
De tu mano y a tus brazos,
Con vos y por vos,
Caigamos o huyamos
Del mártir aburrimiento, 
que exige subsistir en esta lid,
 que no prospera
Ni grita el duelo,
Al orgullo por sobrevivir,
 Consentir tiene coste,
Pero sentir resucita al caido en la lid.

martes, 18 de marzo de 2014

XXIII

Tacones inmortales,
Que con cuyo fuego ensalza el espíritu
Al fragor de la fiesta.
Nunca muere su voz,
Que con estruendo en su día ensalzó al alma
De su tierra,
Que se yergue altiva
Al corazón de sus amantes,
Que alborotan la sangre del transeúnte con esa llama divina fallera.
Las manos se alzan y en plena unión aclaman al primer estallido, expectantes y deseosos,
De regocijarse al clímax de la tempestad tan clamada y ansiada,
 Esa mascletá que seduce a jóvenes y mayores, a hombres y mujeres sin excepción.
Con una lágrima sus rostros son iluminados de colores y embriagados de pólvora,
 En esas noches estrelladas de pasión y alegría,
 Donde se rinden al rey nocturno de los cielos,
 Ese castillo que con entusiasmo nos lleva al lecho, con esa euforia aun latente,  
Ferviente temblor de magia que inunda las venas y el alma.
Caminar devotos  a nuestra anfitriona y señora,
Con respeto y adoración incondicional,
 En la humilde generosidad y expectación que es postrada  ante sus ojos,
 La primavera se abre camino en su manto de claveles abrazando su imagen,
 Vestida con honor para la ocasión por su madre tierra,
 Por el espíritu de la pasión fallera donde el fuego es su mirada,
Y el calor del corazón el himno que trasciende los cielos en la voz teñida de emoción.
Postrándose, fieles al clamor con dulce seducción,
Caen rendidos al fin, devorados por su furor,
Sin perderse en la última llama llamada, a la despedida de su amor,
Donde arden sus ilusiones, tristezas... donde el eterno renacer se consuma,
 En un grito que prende los cielos de llamas…
 Y la visión del fuego que consume el monumento,
Despierta siempre de su sopor la pasión de esta tierra,
 La falla, misionera de sueños, dueña de la voz y el pensamiento oculto.
 Se consume rodeada del silencio de sus amantes,
 Acompañada hasta el final fielmente a su honor,
 Con lágrimas la despiden
, clamando la honran entregados a su querer un año más...


viernes, 14 de marzo de 2014

XXII

Ojos bohemios
Llenos de secretos,
Oscuros y dulces,
Como el néctar
Del sentimiento,
Oh ambrosía que
Me secuestras,
A la locura de robar
Un beso sagrado...
Ojos bohemios
Que me inspiráis
Ser mártir del latir,
Que anhela entregaros
Su sentir...
Y postrándome a vos,
Encuentro que ya os sirvo, protejo y adoro,
En silencio...
Si vos me permitís
Ojos cándidos,
De bohemia,
Entregar mi alma
A esta locura,
Que por vos emana
De mis entrañas...

XXI

En la tempestad de la inocencia,
Crece el fuego y muere el llanto,
Se forja la guerrera con espíritu errante,
Su morada el día y en la noche vigilia de sangre,
Lazos que perpetúan el saber,
Promesas por las que luchar,
Una mano al frente y la otra aguardando,
Firme acero que quebranta la valentía del enemigo,
Nadie corre, huir es inútil,
Ahora o nunca,
Siempre unidas y nunca libres,
La muerte marca las sombras,
El silencio su llegada...
Y en una mirada, un sigo aquí...