viernes, 27 de enero de 2012

CONTINUACION LEALTAD FUERA DE LUGAR

4ª PARTE

Mientras Eleonor disfrutaba relajándose y sumiéndose en sus preocupaciones y la perdida de su hermano, así como el reconocer los méritos de su madre y asimilar los últimos acontecimientos y descubrimientos, Estela era instruida por un nuevo video en sus aposentos, mientras observaba a su nueva compañera y protegida, nunca pudo dejar de admirar su figura las pocas veces que tuvo oportunidad de espiarla en las termales de los mas destacados miembros, era un reconocimiento que se les otorgaba a aquellos que demostraban ser un ejemplo para otros y así el resto se esforzaba en alcanzar y superar a dichos, ella nunca se permitió un baño con otros, era algo que le creaba pudor e incomodidad, prefería su privacidad e integridad fuera de la mirada de terceros, pero tal como era su deber también era cuidar aun a distancia de ella, y bien sabia de que algunas mujeres le tenían gran interés e incluso demostraban ser mas avezadas que algunos hombres, por lo que su cercanía debía ser constante, tal así se acostumbro a tales situaciones y a disimular entrando en la zona de saunas para no sumergirse en las mismas aguas, la belleza de la chica era deslumbrante…

El holograma de su antecesor estaba programado para actuar a su petición e instruirla en lo que fuera necesario siempre que lo necesitara, a una orden de su voz, se activo al suspirar y pronunciar la palabra maestro, se sentía muy desorientada sin su consejo y apoyo, jamás esperó semejante honor y ni concibió que el ocupara un puesto así, menos que ella estuviera destinada a reemplazarlo en un futuro, ahora sólo podía lamentar que todo fuera tan repentino y con su perdida, pero ya conocía sus deberes bien que él se los inculcó y esperaba estar lo suficiente preparada para cumplir con todo tal y como él hubiera esperado. El holograma cambiaba de una sección a otro del tablero de mandos, luego informaba de que archivos prestar atención, de cómo llevar la reunión y darse a conocer con los saludos tradicionales entre otros detalles….

Los informes se dividían por sección misiones pendientes, realizadas, dudosas, movimientos y accesos a informantes en ambos lados de la línea militar de los dos bandos, funciones e intrigas de la aristocracia, aliados, renegados y conspiradores, sección de claves, sección de ciencias, sección militar, sección abastecimiento militar, datos del arsenal del hangar, otros zulos y hangares, reuniones anteriores, conspiraciones disueltas, rencillas y grietas en distintos bandos, un sin fin de datos, unos mas señalados para su atención, otros con el nombre de Eleonor para que ésta les prestara mas atención para su labor, enemigos personales, esta ultima fue la primera que abrió, antes de que se enterara la otra parte prefería estar preparada y saber quien pudo quitar del  medio y sus razones a Sebastián. Un informe muy completo de las familias involucradas en anteriores conflictos con la corona, en todas ellas hubo un disidente e incluso una traición por avaricia, el ansia de poder era algo que para dichas familias era superior al honor, también de alguna conquista y rencillas personales de pagar la falta de decoro por no contraer matrimonio, amenazas, esas mas de las que se pudiera contar, también algunas envidias y el desbancarlo para tomar a su hermana y así el poder de su familia y riquezas, eso era algo que él no permitió e incluso colocó guardianas en la servidumbre, era mucho más sencillo encubrir a una mujer al servicio de otros y su lealtad que a un hombre que aspirar a un mayor poder, y su tutor siempre tuvo encanto para las mujeres… por mucho que disimulara que no fuera así y bueno tuviera algún desliz accidental….

Eleonor hacia rato que dejó las aguas termales tras una ducha, en esos instantes se dedicaba a cuidar sus cabellos, la muchacha seguía un ritual que ella ya tuvo ocasión de apreciar en multitud de ocasiones, era relajante verla…  una vez comprobó sus aposentos y ante todo las funciones a conocer, empezó a desprenderse del chaleco antibalas, de la camisa reglamentaria, la interior y la cadena con las placas de identificación, dejando a la vista un vendaje que cubría su torso y llevaba muy prieto, con suma calma, comenzó a retirarla sin prestar mucha atención de cómo asomaban sus senos plenos al aire tras su prisión, estos se mecieron libres y cayeron como dos lágrimas jugosas sobre su torso, mostrando unos pezones muy oscuros que se endurecieron al contacto con el aire, tras estirar los brazos y estirarse, comenzó a sacarse las botas y pantalones, hasta quedarse en ropa interior, busco una toalla y el albornoz, se colocó el albornoz y volvió a sentarse a la espera de que ella saliera, una vez lo hiciera bloquearía el acceso a modo temporal para tener intimidad si es que podía, y configuraría el audio para escucharla de manera inaudible para ella, se podría considerar espiarla pero bueno muchos años cuidando de ella no dejaría de hacerlo ahí dentro, diez minutos tomando notas y pudo suspirar al ver que al fin le dejaba la estancia a su disposición…

Sin quitarse el reloj, accedió de nuevo a los baños y sin detenerse a mirar se metió a la ducha, el albornoz apoyado en el gran lavabo, tras sacarse la mugre, se colocó la toalla cubriendo sus atributos y se dirigió al interior de las aguas termales, su terminal tomaba nota de todo cuanto se acontecía al dormitorio, la costumbre de estar siempre pendiente era firme y aun en la soledad de este inmenso lugar era imposible dejar de seguir los mandatos impuestos en el pasado, aunque no fuera una imposición pesada al fin de cuentas a ella misma le interesaba cumplir dichas ordenes por razones personales.

Sus pensamientos se sumieron en el pasado, mientras su cuerpo se sumía en la calma de las aguas cálidas, en cuando la arrastró Sebastián a una catacumbas, y allí la puso en una situación de indefensión para probarla, para ver si se rendía o gritaba pidiendo ayuda o por el contrario lo enfrentaba y dominaba su miedo y la situación, lo sorprendió guardando la calma y defendiéndose sin perder la mente en lo que hacia u debía hacer, casi consiguió escapar pillándolo por sorpresa, al final la arrastró al exterior y ahí la dejo hasta presentarse en sus entrenamientos e imponerle una instrucción mas pasando por encima del instructor de turno…

Se hizo con su tutela militar, ella continuo en el mismo grupo los primeros años y se le exigió superar al resto para recibir un mayor nivel que se le mostró a modo de veracidad, la admiración y las ansias de superación le pudieron lo suficiente para rechazar su desconfianza, y poco a poco fue mostrando sus progresos y valía, en breve la colocaron con un grupo experimentado, le dieron un numero por el que responder, y siguió hasta superar al resto, desde ese instante las clases periódicas con Sebastián fueron constantes y se le adjudico el cuidado de su hermana a la cual ya miraba en la distancia…

En las primeras semanas no conocía su nombre, al cabo de unos meses solo pensaba en ella, sus cabellos y mirada fría, su gesto altivo e incluso en como seria estar cerca de ella, se tomó por loca en un principio, un tiempo después Sebastián le anunció que le iba a poner como protectora de alguien importante, eso fue todo un halago, luego a las semanas averiguó que seria un familiar suyo, cosa que sintió como una carga muy pesada  a su vez tristeza por que sabría que pronto se alejaría de ella, no supo lo que se le venia encima, hasta que el momento llegó, la acercó a la linde de entrenamientos, hablándole de su nueva posición le comunico que se trataba de su hermana y que ella debía ignorar de esta medida, cuando la señalo un vuelco la volvió del revés, sus ojos se abrieron como platos y un cierto espanto al pensar que ambas eran la misma persona y lo que eso confería, le supo a carga, sintiendo cierta reticencia por dentro, ella bajó su mirada en contra de todo pronostico a lo esperado por su tutor, el cual intuyo pronto de que algo sucedía, al volver recuerda volver la cabeza con una mirada apesadumbrada, no podría acercarse como quisiera y siendo su protectora era mejor que la rechazara a que cayera en la tentación… en esos instantes su tutor poso sus ojos sobre ella y algo le hizo comprender, fue cuando la tomo de la barbilla y la beso en los labios, creando esa reacción de rabia, agresividad y asco en ella, enseguida la soltó y un cierto brillo en sus ojos le dio mas miedo, él se volvió y siguió hacia delante sin mirarla pero con una ligera risa que la brisa dejaba correr hacia donde ella estaba. Le había robado su primer beso sin piedad, y probado que no le gustaban los hombres e incluso él mismo saber de ese echo… la vergüenza y el temor que sintió al ser descubierta por alguien tan cercano fue terrible, hasta que a la noche la llevo a cenar y comenzó a conversar durante horas de Eleonor, sus gustos, recuerdos y preferencias, la instruía mas allá de lo normal, en sus ojos una mirada picara con un brillo casi como divertido, su voz amable y una sonrisa dulce que hasta ese día no había visto, si hubiera sido una niña enamoradiza la habría subyugado pero todo lo contrario, desconfió mucho mas de él hasta que llegó el final de la cena…

“la amas, se te ve en los ojos, la miras desde hace mucho, la observas y anhelas en silencio e incluso has llegado a renunciar a lo que sientes al saber que ella es mi familia y tu futura misión, si alguien la merece eres tu, y en si no hay nadie mejor que tu que pueda cuidar de ella en mi ausencia, darás lo que sea por cumplir por encima de mis ordenes, por que la amas de verdad desde hace mucho, y sabes, no me importa, os quiero a ambas por igual y os deseo a las dos lo mejor sea como sea el futuro, así que deja de rechazar lo que es inevitable, nadie te ordena a quien querer y menos yo.”

Sus palabras la dejaron clavadas en el asiento totalmente ensimismada e incrédula de lo que sucedía, el de daba libertad e incluso no la juzgaba, para colmo no vio mal que fuera hacia su familia el sentimiento es mas se diría que lo elogio como si le diera un seguro adicional, ese hombre era insospechadamente astuto.

Ahora tenia que enfrentarse a algo mas volátil, la madre y compañera de su tutor, ignoraba si ella conocía los sentimientos que siempre albergó, si así fuera se pregunto si los rechazaría, a fin de cuentas ya solo quedaba Eleonor para sellar su linaje y continuidad, nunca la puso al corriente de que hubiera algún otro descendiente por parte de él, era muy riguroso con su intimidad, suspiro algo consternada sintiendo como si todo su mundo cayera a tierra y un monte la dejara atrapada en la presión y el temor de tantos cambios, y todavía quedaba mucho por hacer por lo que comprobó en los archivos, ella pronto saldría con la imagen de un hombre, aunque no era algo que le fuera desconocido, durante un tiempo no soporto tener senos, ni la menstruación, con el tiempo se acostumbró pese a que los ocultaba para evitar la atención masculina y así  no dar señales visibles de sus actos por el movimiento de éstos, de ahí las vendas, tantos años usándolas le era el modo mas cómodo de ocultarlos y sujetarlos, más de una vez se los miró pensando que hacer con ellos…. Sin embargo si sabia que hacer con los de otra mujer, una sonrisa lasciva asomó a sus labios, recordando cuando en un combate otra mujer se la insinuó…

Su mente de derrotero en derrotero, intentando aliviar toda la tensión no se percató de que varias cosas se estrellaban a las paredes de Eleonor, o mas bien la puerta, enseguida se dio cuenta de su descuido, se alzó corriendo se colocó el albornoz e incluso ordenó el desbloqueo de la otra estancia, acudiendo con prisas a la otra habitación pensando que algo no iba bien, no pudo esquivar un objeto arrojadizo que le dio en plena frente antes de caer inconsciente.


Tras caer el cuerpo de Estela al suelo sin sentido, un grito de espanto resonó desde el otro lado de la puerta, Eleonor se precipitó pálida acudiendo a ayudar a la otra chica, en ningún momento pensó que la otra se presentaría así en sus habitaciones sin llamar ni ningún aviso, ella se sentía muy culpable por no haber podido sacar a su hermano del calabozo y trasladarlo a ese complejo y que se hubiera quedado ahí protegido, pensaba que con tantos medios le podrían haber salvado y mientras lavar su nombre sin sufrir su perdida y por ello se dejo llevar por el dolor y la frustración del momento, lanzando cuanto tenia a mano a la puerta como si el fuera aparecer por ahí y darle de pleno, y en cambio de pronto quien apareció fue ella…

Apenas le miro la herida de la cabeza, que casi rozaba la frente, buscó un botiquín el cual estaba a la vista al lado del espejo, tras eso comenzó a darle la primera cura, sus ojos iban de lo que hacia a la toalla que apenas le cubría, y a sus piernas, sin poder dejar de fijarse en el borde de ambas donde se ocultaba bajo la tela su sexo, y preguntándose cosas que una dama no debería…

Intento centrarse en cuanto hacía y evitar ciertos pensamientos, no era lógico a fin de cuentas mirar a una mujer así y menos a su compañera, jamás se planteó ciertos intereses y no era el momento tras el fallecimiento de Sebastián se sentía muy sensible a cosas que no pensó que pasarían y por supuesto no quería equivocaciones que luego le pesaran.

No es que ignorara lo que muchas ocultaban pero tampoco se planteaba nada en concreto, siempre la tuvo cerca y no se planteaba la posibilidad, mientras su mente ponía orden en ciertas ideas, alzó a la chica y la sostuvo en alto pensando si podría llegar a sus habitaciones o mejor seria llevarla a la propia, mejor en la suya que no fuera que no pudiera entrar en la otra y por supuesto viaje en balde cargada, así que tomando acoplo de fuerzas comienza a caminar y con la voz da la orden de abrir, por suerte justo después de entrar pudo en su zona privada cambiar el protocolo de acceso.

Sintiendo la piel cálida de serena en sus manos, suave y sedosa como piel de melocotón termino de trasladarla hasta su catre y ahí la deposito, la toalla se estaba deslizando de sitio, y empezaba a dejar ver el vello púbico, tuvo que cerrar los ojos y con un esfuerzo de voluntad cubrirla con el cubre y alejarse a recuperar aire, pues de alguna manera había dejado de respirar.

Se acercó a la terminal y  accediendo al escáner y servicio médico pidió un diagnostico de la chica, cada vez se sentía mas culpable y mucho peor al ver que no volvía en sí.

Al cabo de un par de minutos la pantalla resplandeció con un esquema corporal de ella y sus constantes, todo correcto simplemente inconsciente y agotamiento, en unas horas podría volver en sí con fuertes cefaleas por la herida…

Al menos algo mas tranquila se acomodó en su asiento y buscó una manta ligera al armario y después se tapo antes de dormir, dejando al sistema el aviso de alertarla por el micro de su oreja de cualquier cambio en ella o de la llegada de su predecesora al complejo.



1 comentario:

teddy dijo...

seguinis avanzando en la historia de eleono y estela, ahora todo pasa en la base de ellas y e podido ver detalles interesantes, parece q la siguiente parte sera de accion, no se como alguien pudo llegar hasta hay.
gracias por tu esfuerzo saori