Las ideas son felinas en una mente despierta y los conceptos ambiguos en pensamientos abiertos a la realidad, tres tristes tigres, mucho hemos escuchado, asumido pocos, aceptado en presunción y siempre la misma conclusión un tigre muere por la boca pues trigan en la mentira ajena, el segundo del corazón, bajo el rechazo del amor propio, el ultimo de soledad bajo el yugo del rechazo…
En boca ajena se siembra la maldición ya sea por hipocresía, malicia o diversión, malditos aquellos que de la mentira se valieron pues un tigre honesto hirieron de muerte maldiciendo su vida con la desconfianza y la desdicha pues si dignamente vivía finalmente muere solo por la envidia ajena.
En la duda queda la ambigua cordura y la seguridad de saber que la dignidad y el amor que uno profesa no se recibe igual por aquellos que ni comprenden ni consideran, que un ser noble se entrega al prójimo con la simple condición de hacer feliz a quien puede y aprecia y si eso fuera poco se pone entre dicho su valía y hechos, muriendo de la espada del rechazo y olvidando entre calumnias su amor a los demás, su felicidad de quien le rodea y perdiendo la fe en aquellos que le apreciaron incondicionalmente.
Si uno es distinto no significa que sea alguien malo, no implica que sea de condición dudosa, tampoco que merezca vivir solo y menos que por incomprensión se le deba dar la espalda, en la necedad del miedo y la falta de tolerancia un tigre se recoge en la soledad por no ser mirado con igualdad y el rechazo abarca su vida como un yugo hacia la cobardía de ser sentenciado de crímenes que jamás cumplió mas que en las mentes corruptas de quienes nada valoran mas que su poder sobre los demás.
Tres tristes trigan en un trigal, de incomprensión, falsedad y dolor, trigan a la espera de su liberación, y aquel que en su ultimo suspiro les devuelva la paz y la fe de vivir, recibirá el amor incondicional de unas almas puras y nobles que por mucho no vieron la luz bajo la mirada del desprecio y encontraron en esta nueva persona un rayo de sol al cielo.
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