El punto de vista puede ser subjetivo, pero el corazón no es
ciego…
La negligencia de esta sociedad
es no implicarse en situaciones que consideran prioridad de la familia y no del
estado. Temer equivocarse y luchar por el bienestar de los desamparados.
El miedo guía a los sumisos y
temerosos del estado, miran a otro lado y defraudan sin levantar la mirada en
la dirección correcta, negándose a señalar el mal que aqueja a tantos menores,
desprotegidos ante familiares que abandonan sus necesidades, crecen en la mala
crianza de padres egoístas, con falsas fachadas de ejemplo, incluso de ausencia
emocional…
Existen reinas que intimidan a
corazones indefensos, que arrastran grandes males y se tiran a matar a quienes
no reconozcan su autoridad, crean un infierno a su alrededor para sentirse
superiores, cómodas y fuertes…
En muchas familias existen reinas
de Saba, todo lo consiguen a costa de la propia familia, son arpías en un
estanque que controlan, manipulan y del que se aprovechan hasta la saciedad.
Caminan por el mundo engañando al
confiado, aprovechándose de la fragilidad de otros y de la confianza
conseguida, fácilmente consiguen su propósito a cambio de promesas, mentiras o
sencillamente presionando, bajo la vil amenaza de denuncias…
Son reinas en su mundo, no se
frenan mientras se crecen, arrastran al fango a quien se les interponga y se
ríen en tu cara cuando exiges respeto y justicia. Usan la dignidad por bandera
sin entender en verdad cuán importante es y cuanto peso tiene, se llenan la
boca de veneno,
Indefensos aquellos que comparten
techo con una reina, sufren su presencia, caminan entre sombras y suplican en
silencio que no les caiga su atención encima.
Su cercanía es una carga, un
problema con fuertes vientos de soberbia, nadie la soporta una vez conocen su
esencia, la rehuyen como a la inmundicia, no cabe ni en la cisterna del aseo…
Así y todo se presentan sin ser
invitadas, todo festín es bueno si amargan al prójimo, arrastran a la
descendencia con ella para causar más polémica y mientras se aprovechan de los
beneficios que caen del cielo o el estado…
En su colmena todos la sirven,
evitando sean fustigados día y noche hasta se canse, la vida se convierte en un
castigo si la abandonas, si dejas de servirla, se asegurará te arrepientas
hasta retornes a su enjambre, recuperando sus beneficios, así controla y
domina, a los mansos de buen corazón…
Una reina de Saba gobierna en su egoísmo
y capricho, en muchas familias que callan evitando el conflicto, mirando a
infantes que no merecen ser separados de su madre y a la vez no merecen una
madre de ese tipo, todo queda en entredicho, la mirada a la realidad y lo que
tiene que ser se vuelve subjetiva, muchos temen equivocarse…
La cuestión es si agachando la
cabeza no se equivocan… si en vez criar mujeres dignas, están alimentando el
ego de una reina de Saba… si son dignos de su familia al no enfrentar ese
veneno en la rama familiar…