EL VASO

 

 

 

No idealicen al vaso, solo por que lo ves lleno, es fácil ver un vaso lleno en la distancia, creer que esta abundante de bendiciones, verlo como tu oasis, sin embargo, ignoras como se llenó, si es una abundancia sana o envenenada, si te sabrá buena su compañía o por el contrario te sabrá amarga.

No salgas de que a caballo regalado no se le mira el diente, si tu eliges el vaso, quizás lo que veas no sea lo que crees y te puedes arrepentir, una persona no sabes lo que esconde al fondo del todo, asi que limítate a conocerla, y cuando se vaya vaciando un poco el vaso ante las vicisitudes, valora si te es beneficioso lo que ves al estar a medias tintas.

A veces uno se precipita al ver a una persona brillar, pero ignoras su recorrido por esta vida, desconoces como a mantenido ese carisma, si es una persona que se implica o evita los problemas, desconoces su actitud ante un reto, en verdad un vaso lleno no implica que sea bueno.

Uno llena sus vacíos buscando joyas en el camino, viviendo el reflejo de esa luz sobre ti, hasta que la llama de las velas se apaga y no te gusta lo que ves, mejor dicho, lo que no ves, así que no nos compliquemos más la vida.

Si el vaso se vuelca sobre ti y derrama en ti su contenido, huye, tiene mas carga emocional de lo que te imaginas, una sonrisa puede ocultar un gran mal en el alma, no te digo que abandones al desvalido, pero ten en cuenta que si no estas listo, no le causes mas males de los que ya lleva, mejor dicho, no te conviertas en otra de sus decepciones.

Si comparten el vaso contigo y te animan a volverlo a llenar, oye ahí puede encuentres mucho potencial, hay pilones de gran valor que uno no ve fácilmente.

Los vasos tienen un gran valor en las reuniones, el como se vacían, de que se llenan, el ansia con que lo coges o bebes, si compartes, si te aíslas, todo dice algo, el como llenas o vacías tu vaso también, con quien lo llenes todavía más, pero si lo vacías que sea en buena compañía siempre, no es bueno rellenarlo de lagrimas ni rencores, tomemos una copa para sonreír y disfrutar el momento, no nos tiremos por tierra con las amarguras pasadas.

Si ves un brandy observándote, no olvides su naturaleza fuerte, disfruta el momento, su ardor envolvente, su fuerza siempre será el atractivo ante los retos de la vida.

En cambio, si ves un vaso de agua, se su hombro, su apoyo, escúchela, pero si no estas preparado para llevar las riendas en la relación, se su amigo sin dar esperanzas de algo más.

Si la vida te trae un zumo de frutas, ese frescor te dará ánimos de viajar, de vivir la vida al máximo, esa intensidad te arrastra, estar a su lado es una montaña rusa, si estas listo tírate y sino por los límites.

Ten muy en cuenta un detalle, en esta vida existen muchos vasos pero si bebes del equivocado te puedes arrepentir, no culpes al vaso sino a tu mala elección, así que asume tus equivocaciones, no ensucies tu vaso con acciones toxicas.

Mira bien de que llenas tu vaso y que atraes a tu vida, a veces puedes llamar a tu propio reflejo, si es así no te quejes al mundo y cambia tu contenido o como mínimo mejora lo.