En tu crisálida
oculta al mundo,
Aguardas en silencio,
Mientras existes
Inerte de
sentimientos,
Con los que
contemplar
El futuro.
Llegará a su fin la
espera,
El tiempo habrá dado
un nuevo giro,
Tu ser ha
evolucionado renaciendo,
Sentirás hambre de
mundo,
Desearás, buscarás,
vivirás,
Con expectativas
asombrosas,
Hallarás emociones
incalculables,
Mientras muchos te observan,
Inundaras el cielo
con tu presencia
Con colorido, con
alma, con fuerza
Y agallas, impulsándote
a volar alto,
Para muchos un destello
de vivos colores,
Para otros un fugaz
recuerdo,
Para algunos la razón
de una sonrisa,
Y puede que con algo,
en apariencia insignificante,
Perdure en su
recuerdo como algo magnifico.
El esplendor de tu
existencia alumbrará
En ese paso que es su
vida,
En esa mirada con ilusión
gozarás de las promesas,
En un encuentro embellecido
con la alegría encontrarás
Un aleteo al futuro,
Vislumbrando la llama de esa plenitud ansiada.
Si a tanto se puede
alcanzar
Siendo una mariposa
en esta selva,
Pues cada alma nace
inocente,
Siendo conciencia y
voz,
Crece en aleteos de
ilusiones,
Aprende luciendo
colores,
Esos que aún
invisibles
Se remueven en el
interior de tu ser,
Que nos estremecen o
alzan a la luna,
Son sentimientos que
nos marcan,
Siempre en su mano
alcanzaremos el sol,
Con nuestras alas de
fe,
Nos cruzaremos con
otras viajeras
Cuya estela deje su
marca en el infinito recuerdo,
O se perderá en algún
tropiezo con el olvido…